Soy un enano en un mundo de gigantes, en el que todos me miran por encima del hombro.
Soy un ser bajito en un planeta lleno de gente alta, donde me pisotean sin ni siquiera pedir después disculpas.
Soy un gnomo en un lugar en el cual todos hacen cosas bellas y grandes.
Soy el tipo que no destaca, aquel al que rehuyes la mirada al pasar, ese ser al que se ignora mecánicamente. Un paria, un habitante de Molokai, el marcado, el señalado, el repudiado, el enano que pasa entre vuestras piernas sin que os deis cuenta.
Pero cuando las cosas van mal, allí voy yo. El cabeza de turco, el que se introduce por los lugares angostos y hediondos donde la sociedad no quiere entrar.
Soy al primero que recurrís. Soy el que os salva el culo aunque no lo sepáis. Soy al que no dais las gracias por poder seguir con vuestra vida repleta de rutina.
Y entonces, yo soy el gigante. Y aunque me piséis, me ignoréis o me rehuyáis... soy yo el que siempre os termina mirando por encima del hombro.
